TE ASUSTA QUE SUENE...

¿Te asusta que sueñe verdad? Temes que un día el amor por ti se desborde inúndame los ojos y que el corazón te suplique que no te vayas, que te quedes junto a mi… ¡No! ¡Por favor, cálmate! No quiero que pienses que no entendí lo que tantas veces me explicaste, no deseo que tus pensamientos se alteren buscando respuestas que ya me aprendí de memoria, no puedo exigirte que me ames, se que te gusto, que te sientes bien a mi lado, que disfrutas de mi presencia pero que no estás preparado para amar con limites anulados como yo. Lo sé y lo entiendo, solo que el tiempo pasa y que la fantasía de tenerte por siempre conmigo hace que sueñe con un futuro en el que me veo feliz a tu lado, pero es un sueño singular, un sueño que me vuelve a la realidad cuando brotan de ti justificaciones que ponen un muro inmenso entre los dos, son solo destellos de ilusión los que me invaden cuando me besas y deslizas caricias en mi rostro, también me sucede cuando tu mano entrelaza la mía y me invitas a seguirte por instantes que hago eternos…

Te asusta que no tema al abismo que me ofrecen tus temores, porque aunque no lo admitas temes a enamorarte o quizás a reconocer que estás enamorado… Cuando me inundaste aquella tarde con la luz de tu mirada me sentencié a amarte, a conquistar tu amor, a ser de ti, pero la distancia que interpones entre lo que siento y lo que quieres hace que esto comience a desvanecer y que aquella sentencia busque quebrarse sin que tan solo produzca un pequeño ardor en el alma, ya no siento la necesidad de petrificarme en tu pecho cuando llegas con una rosa para mi, será porque comprendí que fue un arrebato del momento o porque quisiste evitar que te pregunte porque nunca me ofreces el detalle de una rosa roja si sabes que las adoro, puse tantas cosas en frente de ti para hacerte más fácil el camino para llegar a mi corazón, tal vez ese fue mi error, tal vez eso te alejó de mi.

¿Te asusta que sueñe, verdad? Te asusta cuando tiemblo en un abrazo. Deseas despertarme cuando en un beso te consumo el alma. Pretendes que sienta sin interponer el corazón.

Temes tantas cosa amor, temes mi sueño junto a ti, temes sentirte amado, pero no te preocupes, ni busques más justificaciones, que ya las entendí porque siempre son las mismas, ya este motor comienza a calmarse, será porque se cansó de insistir, de golpear la puerta que herméticamente cerraste, se cansó de insistir sin oír ni sentir algo bonito desde aquel lado, desde aquel sitio donde habita tu corazón…

De momento me quedo, deseo descubrir a que sabe querer como quieres tu, quizás algún día tu aprendas a amar como yo y si ese día decides golpear mis puertas espero no haber aprendido tus formas, porque entonces mi puerta estará cerrada para ti como hoy lo está la tuya para mí.

AUTORA:DALIA HERNANDEZ.